sábado, 30 de junio de 2018

Personajes de la Revolución (General Benjamín Argumedo "El Tigre de la Laguna", ¿Héroe o Traidor?)


General Benjamín Argumedo “El Tigre de la Laguna” (Héroe o traidor)

La historia oficial nos dice que el General Argumedo, no fue un héroe, porque masacro a los chinos en la primera toma de torreón (1911), porque combatió al lado de los huertistas y porque traiciono a Zapata.

El General Benjamín Argumedo, nació en la comunidad de Gatuño (hoy Congregación Hidalgo, Coah.), le apodaban 'El León de la Laguna' y combatió para ambos bandos, en su inicio como revolucionario fue maderista, después apoyo el Plan de la Empacadora encabezado por el General Pascual Orozco, en donde se desconocía al gobierno de Francisco I. Madero, se volvió huertista y combatió tenazmente General Francisco 'Pancho' Villa, en las batallas de Torreón y Zacatecas.

Se negó a aceptar los Tratados de Teoloyucan y se levantó en contra del gobierno de Venustiano Carranza, convirtiéndose otra vez en rebelde. Empezó a operar entre los estados de Puebla y Morelos, en compañía de los generales Juan Andrew Almazán e Higinio Aguilar, en otras, al lado del General Emiliano Zapata.

Participo en el gobierno de la convención. Cuando se dirigía hacia el norte, fue sorprendido y derrotado en La Gruñidora, Zac., por el General Ascención Aguilar y Frías, fue tan sorpresivo el ataque, que Argumedo tuvo que huir en paños menores, posteriormente el General Benjamín Arrumado se desquito y derroto en ciudad Lerdo al General Aguilar y Frias, colgándolo en un árbol cercano a las compuertas del Río Nazas.

Finalmente, enfermo de tuberculosis se refugió en un ranchito llamado “El Paraíso”, hasta ese lugar llego el General Juan Bautista Vargas Arreola, comisionado por el General Francisco Villa, con el fin de saber que había pasado con el Gobierno de la convención, en sus memorias publicadas con el título “A sangre y fuego con Pancho Villa”, nos relata paso a paso su encuentro con el “Tigre de la Laguna”.

El General Bautista Vargas, trato de llevarse al enfermo, pero era tal su enfermedad, que no pudo hacerlo, finalmente el General Benjamín Argumedo, fue traicionado por algunos de sus allegados al amnistiarse al gobierno de Carranza. El General Argumedo fue fusilado en la Penitenciaría de Durango y no en el panteón como el general lo había solicitado, el 1/o. de marzo de 1916. Las crónicas de la época decían que al paredón llego el General Argumedo más muerto que vivo, así murió un valiente, que los villistas respetaban por su valentía en el combate. Así murió este héroe ignorado por la historia, el llamado “Tigre de la Laguna” y le decían así, porque, él nunca tenía miedo y esto lo demostró con creces.

La Batalla de Torreón (Resumen final del 27 de marzo al 2 de abril de 1914



Resumen del 27 de marzo al 2 de abril de 1914

El 27 de marzo. Nuevamente el General Villa, por conducto del Cónsul Inglés, pide la rendición de la plaza de Torreón y una vez le es negada por el General José Refugio Velazco.

El 28 de marzo. Se inicia el ataque a Torreón, la plaza estaba defendida por aproximadamente 10 mil hombres de las tres armas (Caballería, infantería y Artillería). Entre los días 28 de marzo y 1/o de abril, se llevan a cabo muchos duros combates en los diferentes frentes de defensa de la ciudad.

El número de atacantes a Torreón, nunca dejó de ser menor a cinco mil hombres y esto se debe, a que el ataque no se llevaba a cabo simultáneamente

Durante el ataque final, el General Francisco Villa ordeno que se trasladara de inmediato a San Pedro de las Colonias una fuerza integrada por 2 mil hombres al mando de los generales Toribio Ortega y Rosalío Hernández, con el fin de detener a una fuerza federal que venía en auxilio de los defensores de Torreón.

El 1/o de abril. En este día Torreón fue atacado por varios frentes durante el día y toda la noche, los federales tienen enormes pérdidas entre muertos y heridos. Las tropas villistas también tienen muchas bajas, pero logran apoderarse de nuevas posiciones cerrando el cerco sobre los defensores de Torreón.

 El 2 de abril. Desesperado por lo sangriento y rudo de los asaltos, defendiéndose entre cadáveres y habiendo perdido la esperanza de recibir auxilio, el General José Refugio Velazco, decide evacuar la plaza, para tal fin aprovecha una fuerte polvareda que oscurece la zona.

Su salida es precipitada, dejando atrás un inmenso botín de guerra, integrado por varios cañones y ametralladoras, miles de cartuchos y más de 2 mil granadas de fabricación extranjera, varios trenes cargados de mercancía diversa y 125 mil pacas de algodón

Los federales en Torreón tuvieron aproximadamente 1,000 muertos, 2,200 heridos, 1,500 desertores y 300 prisioneros. Las fuerzas villistas tuvieron 600 muertos y aproximadamente 1,200 heridos. En el combate el que perdió más, fueron los federales, porque esas bajas que tuvieron, no tenían forma de cubrirlas.

Durante el combate, las fuerzas villistas consumieron, millón y medio de cartuchos, 3,000 bombas de dinamita y 1, 700 granadas. Mientras que los federales, consumieron tres millones de cartuchos y 4 mil granadas.

Doce horas después de ocupada la ciudad de Torreón, todos los servicios estaban andando, se restableció el alumbrado público. El General villa ordeno que se patrullara la ciudad, con el fin de evitar saqueos y mando levantar el campo, ordenando que se enterraran todos los cadáveres.

El resto de la guarnición federal se dirigió a Viesca, con el fin de reagruparse.